Ciudad de México. — ¡Aguánteme la carreta! El que de plano se pasó de abusivo y demostró tener menos pizca de decencia fue el diputado priista Rubén Moreira, ese que es la sombra de «Alito» Moreno. Resulta que el legislador salió con la jalada de que la Presidenta Claudia Sheinbaum andaba «condicionando el voto» en Hidalgo, ¡justo en medio de la desgracia por las lluvias!

La cosa es que a la mandataria le dio por bajarse a oír los quejidos de la gente en Tianguistengo. Y sí, un paisano, con toda la razón del mundo, le fue a reclamar el mal trabajo del alcalde, que por cierto es de la 4T. Sheinbaum, ni tarda ni perezosa, le contestó lo que cualquiera con dos dedos de frente: «Sí, ya me dijeron… pero ustedes también, a la próxima, cuando voten…»

¡Y ahí fue donde Moreira vio moros con tranchetes! El priista, con esa mala leche que le caracteriza, cortó el video y corrió a Twitter a gritar que la Presidenta estaba pidiendo votos a cambio de ayuda. ¡Ay, Dios mío! Como si la gente no supiera que Sheinbaum solo les estaba recordando que el pueblo es el que manda y el que pone el cascabel al gato con su voto. ¡Si hasta el alcalde reclamado es de su propio partido!

La Presidenta, muy contundente y sin andarse con rodeos, le puso el estate quieto este lunes: tildó de «mezquina y ruin» la actitud de la oposición por querer sacarle raja a la desgracia.

Y es que no se puede ser más cínico: mientras la gente perdió todo, el diputado de «Alito» –ese que tiene su propio historial de oscuros manejos cuando fue gobernador de Coahuila–, solo piensa en cómo echar lodo para ganar puntos políticos.

¡Para este tipo de políticos, no hay tragedia que no se pueda convertir en un circo!